Es curioso que esta sea una de las preguntas que mas me hacen muchos de los candidatos que están buscando moverse de forma pro activa.

Una de las mayores dificultades que tienen los profesionales es ofrecer una cifra ante la pregunta ¿Cuál es tu expectativa salarial?.

Varios son los factores que juegan en contra del candidato a la hora de negociar el salario y los beneficios sociales. Uno de ellos, por ejemplo, es el miedo a que la empresa retire la primera oferta que ha puesto encima de la mesa. Otro de los factores es el desconocimiento en habilidades de negociación, sobre todo cuando no hay nada que perder. Es muy distinto buscar trabajo estando fuera del mercado laboral que estando dentro. Tu posición frente al potencial empleador es distinta o eso es lo que puede parecer, porque no es así.

La mejor forma de analizar en qué punto estamos y si somos buenos negociadores o no es ver si cometemos los errores mas comunes en esta etapa del proceso de selección.

La Sociedad de Gestión de Recursos Humanos (SHRM( llegó a varia conclusiones bastante significativas después de realizar una encuesta sobre este tema:

  1. No tener habilidades de negociación y no conseguir una subida salarial en cada cambio de empresa puede suponer entre 500.000$ y 1Mill que dejas de ganar al final de tu vida laboral.
  2. La mayoría de mujeres tienen miedo a tratar de negociar, no reconocen su valor total.
  3. Las personas desempleadas creen que están en una posición de desventaja, porque necesitan el trabajo y el empleador lo sabe. Una buena orientación profesional puede poner en valor tu trayectoria y ser capaz de negociar, bien, tu vuelta al ruedo.

 

Estas son algunas de las estrategias de negociación, para poner en valor vuestra experiencia, frente a un proceso de selección y un potencial cambio de empleo:

  1. Conoce el valor de tus habilidades y herramientas. Mira en el mercado cuánto están pagando a perfiles similares al tuyo en función de los años de experiencia, de la formación, certificaciones, etc.
  2. En la primera entrevista, REVENDETE, trae a colación todo lo que puedes aportar y que esté relacionado con las necesidades del empleador. Reafirmarte en las razones por las que te necesitan, en las herramientas que puedes aportar, en tu experiencia en campos determinados a través de proyectos concretos y los éxitos conseguidos.
  3. Confirma, al final de la entrevista, tu interés en el puesto y manifiesta que el salario no cumple con tus expectativas ahora mismo. Esta es una fantástica manera de decir: “Me interesa el puesto, pero valgo mas por todo lo que puedo aportar. Haz un esfuerzo”.
  4. Los bonos, variables, opciones de compra, revisiones salariales están muy bien pero son paja. Donde hay que conseguir el aumento es en el Salario Bruto Anual, cada euro que consigas aumentar ahí, es una victoria.
  5. Si tienes una cifra en mete, coméntala sin problema. Será trabajo de RRHH (o de quién esté gestionando el proceso) hacer el esfuerzo para conseguir llegar a esa cifra.
  6. No todo beneficio es dinero en la vida. Otra forma de mejorar las condiciones de empleo es disponer de mas tiempo de vacaciones. En la entrevista comenta las que tienes actualmente y expresa las que te gustaría tener y que serían un plus para ti. Podemos trabajar, también, sobre el seguro médico y la inclusión de familiares, seguro de vida, aportación al plan de pensiones, etc.
  7. Una de las mejores técnicas para conseguir cualquier objetivo en la vida, es practicas y visualizar la situación, el momento, el ambiente, y verte desarrollando la entrevista y toda la negociación posterior. Es una técnica efectiva, por repetición, que consigue que interiorices tus movimientos y surjan de forma automática. Además, dedica tiempo a ensayar la entrevista con algún familiar o amigo y observas sus reacciones y comentarios.
  8. Y por último, ten en mente el salario que quieres percibir siendo muy consciente de que la empresa puede no aceptarlo. En este caso es importante saber que quizá no sea tu momento para un cambio y que la oferta puede que no llegue nunca y tengas que esperar a otra que se adecúe, más, a tus necesidades. Para esto es bueno tener una cifra concreta de la cual nunca bajarás (la mínima necesaria para vivir) y, a partir de aquí, comenzar a negociar.

 

Por último, una vez negociados los términos de tu oferta, pide que te envíen una carta oferta que resuma todos los puntos fundamentales tratados que, posteriormente, quedarán reflejados en el contrato. Todos y cada uno de ellos deben estar incluidos y la carta debe ir firmada y sellada por la empresa. En esta carta, o en el contrato, es MUY bueno que se exprese, también, cuáles serán las responsabilidades del puesto y las tareas que el nuevo empleado tendrá que desarrollar.

En muchas ocasiones ocurre que te contratan para desarrollar unas labores concretas y pocas semanas después de haber empezado, comienzan a pedirte que asumas mas y mas obligaciones y responsabilidades que no estaban encima de la mesa durante la negociación y que, por lo tanto, no se han podido valorar para cerrar los términos económicos particulares.